Tucho
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Queridos foreros: en un post escrito hace meses os relaté mi rotura del bíceps y problemas siguientes. Justo es que ahora os cuente cómo han evolucionado las cosas.
Fui al médico de cabecera. Estaba un suplente _comorr_ que me envió al traumatólogo por preferente. Ese "preferente" significaba TRES MESES _ehhh!_ de espera. No me atreví a ir a urgencias, puesto que él no me había dicho nada, sino que no hiciera ejercicio si me dolía y que hiciera reposo(¡gracias, doctor!).
Tras los tres meses de espera, en los que me puse en manos de un fisioterapeuta para no perder masa muscular, fui al especialista. Una traumatóloga que me atendió muy bien. Puedo recordar perfectamente su cara de sorpresa cuando me miró diciendo "¡tres meses!". Me ahogo de ganas de denunciar al de cabecera, pero en fin... El caso es que el músculo se me ha soldado mal, y las terminaciones tendinosas han desaparecido. Si hubiera ido al principio, todo habría sido más fácil.
La traumatóloga me mandó ir a hacerme una ecografía. Como era de esperar, dos meses más tarde me atendió una doctora ecógrafa muy amable que sin decirme nada nuevo, me animó a operarme. Vuelta a la traumatóloga dos semanas después para recoger resultados.
Ésta me dice que no me aconseja operarme, que la operación es muy compleja y la rehabilitación larga... Os comento lo que puedo recordar: la operación consistiría en rajar el brazo desde el bíceps hasta la mitad del antebrazo. Romper el bíceps para sacar unos "extremos". Éstos irían enganchados en una especie de garfios que hay que insertar en el uno de los huesos del antebrazo, previamente perforados para insertarlos. Esta especie de "anzuelos" se quedarían ahí para toda la vida, aunque ahora, me dijo, los hay de un material que se subsume por el organismo y bla, bla, bla.
Luego la rehabilitación, porque al romper y estirar el bíceps, el brazo se me quedaría encogido, con lo que tendría que hacer ejercicios para recuperar la extensión poco a poco... meses y meses. Todo esto sin contar la pérdida de masa muscular, el peligro de "desenganche", etc., etc...
Al final decidimos que como, en principio, no necesito utilizar la fuerza del brazo excesivamente para mi profesión, no me operara, sino que comience a hacer rehabilitación (¡dentro de un mes, claro!) para que me enseñen los ejercicios que tengo que realizar a fin de fortalecer los músculos adyacentes y recuperar en lo que pueda la masa perdida en el bíceps. La deformidad (el bíceps se me contrae hacia el pecho, no hacia arriba) me acompañará toda la vida como una herida de guerra. Concluyendo:
1. Si os suena un músculo igual que si rompierais una tela, id enseguida A URGENCIAS.
2. Dad gracias a Dios (yo se las doy) si podéis mover el brazo con normalidad y hacer vida normal.
3. No dejéis el gimnasio del todo si tenéis una lesión. Si yo lo hubiera dejado, posiblemente no podría levantar ni medio kilo con el brazo malo.
4. Tengo mucha suerte de que mi esposa no me diga nada respecto a la "deformidad" del bíceps izquierdo.
5. También doy gracias a Dios por no ser albañil ni dedicarme profesionalmente al culturismo.
6. Para más abundamiento, os pongo unas fotitos.
7. Gracias por aguantarme. Sois fabulosos.
Fui al médico de cabecera. Estaba un suplente _comorr_ que me envió al traumatólogo por preferente. Ese "preferente" significaba TRES MESES _ehhh!_ de espera. No me atreví a ir a urgencias, puesto que él no me había dicho nada, sino que no hiciera ejercicio si me dolía y que hiciera reposo(¡gracias, doctor!).
Tras los tres meses de espera, en los que me puse en manos de un fisioterapeuta para no perder masa muscular, fui al especialista. Una traumatóloga que me atendió muy bien. Puedo recordar perfectamente su cara de sorpresa cuando me miró diciendo "¡tres meses!". Me ahogo de ganas de denunciar al de cabecera, pero en fin... El caso es que el músculo se me ha soldado mal, y las terminaciones tendinosas han desaparecido. Si hubiera ido al principio, todo habría sido más fácil.
La traumatóloga me mandó ir a hacerme una ecografía. Como era de esperar, dos meses más tarde me atendió una doctora ecógrafa muy amable que sin decirme nada nuevo, me animó a operarme. Vuelta a la traumatóloga dos semanas después para recoger resultados.
Ésta me dice que no me aconseja operarme, que la operación es muy compleja y la rehabilitación larga... Os comento lo que puedo recordar: la operación consistiría en rajar el brazo desde el bíceps hasta la mitad del antebrazo. Romper el bíceps para sacar unos "extremos". Éstos irían enganchados en una especie de garfios que hay que insertar en el uno de los huesos del antebrazo, previamente perforados para insertarlos. Esta especie de "anzuelos" se quedarían ahí para toda la vida, aunque ahora, me dijo, los hay de un material que se subsume por el organismo y bla, bla, bla.
Luego la rehabilitación, porque al romper y estirar el bíceps, el brazo se me quedaría encogido, con lo que tendría que hacer ejercicios para recuperar la extensión poco a poco... meses y meses. Todo esto sin contar la pérdida de masa muscular, el peligro de "desenganche", etc., etc...
Al final decidimos que como, en principio, no necesito utilizar la fuerza del brazo excesivamente para mi profesión, no me operara, sino que comience a hacer rehabilitación (¡dentro de un mes, claro!) para que me enseñen los ejercicios que tengo que realizar a fin de fortalecer los músculos adyacentes y recuperar en lo que pueda la masa perdida en el bíceps. La deformidad (el bíceps se me contrae hacia el pecho, no hacia arriba) me acompañará toda la vida como una herida de guerra. Concluyendo:
1. Si os suena un músculo igual que si rompierais una tela, id enseguida A URGENCIAS.
2. Dad gracias a Dios (yo se las doy) si podéis mover el brazo con normalidad y hacer vida normal.
3. No dejéis el gimnasio del todo si tenéis una lesión. Si yo lo hubiera dejado, posiblemente no podría levantar ni medio kilo con el brazo malo.
4. Tengo mucha suerte de que mi esposa no me diga nada respecto a la "deformidad" del bíceps izquierdo.
5. También doy gracias a Dios por no ser albañil ni dedicarme profesionalmente al culturismo.
6. Para más abundamiento, os pongo unas fotitos.
7. Gracias por aguantarme. Sois fabulosos.
Un abrazo.
