Ciertamente, depende el grado de afectación y de funcionalidad de tu rodilla.
Los meniscos, de forma coloquial, podrían decirse que son unas almohadillas que amortiguan el impacto femorotibial, evitando así el daño de la región de congruencia articular. Si te los quitan (meniscectomía) vas a perder esa amortiguación, por lo cual el desgaste de las estructuras blandas va a ser mucho mayor; por lo que esta operación está pasando a más ver.
Generalmente, en roturas leves, se emplea el tratamiento conservador. Éste tratamiento no consiste unicamente en no hacer nada; sino en ver aplicadas un tratamiento no invasivo de fisioterapia. Hielo, reequilibrio de la musculatura, readaptación articular, corrección de la alineación del miembro inferior... Y, si una vez hecho todo ésto, sigues notando una sensación de bloqueo o ves que la rodilla no avanza; la única solución que quedaría es la quirúrgica (y a poder ser mediante sutura del menisco).
Una meniscectomía puede dar como resultado, una artrosis a la larga, y la utilización de una prótesis.