TerenceHill
Moderador
Influencia de la Longitud de los Miembros Superiores sobre la Fuerza y la Potencia Producida en el Press de Banca
RESUMEN
Se evaluaron 37 estudiantes universitarios de 22±2.1 años en los que se determinó el peso corporal (PC), la estatura (E), la longitud del brazo (LBr), del antebrazo (LAN) y la longitud total del miembros superior (LGT) y se realizaron un test progresivo (TPR), en press banca plano con barra libre (PB). Se determinó el peso máximo (1MR), la potencia media (PM) y la (PP) producida con cada peso movilizado en el TPR y se localizaron los porcentajes de peso en donde los lograron los valores más altos de PM (%PM) y PP (%PP). El peso máximo (1MR) mostró coeficientes de correlación significativos (p<0.01) y altos con la PM (r=0.89) y la PP (r=0.905), mientras que La PM y la PP mostraron coeficientes de correlación significativos (p<0.01) y moderados con la E (r=0.53 y 0.57), la LAN (r = 0.62 y 0.63) y la LGT (r=0.55 y 0.59). Los pesos en donde se manifiestan los valores más altos de PM y PP se localizaron al 53.3±10.7% y 47.1±13.8% respectivamente. Se destaca además de poseer elevados niveles de fuerza máxima, ciertas variables antropométricas como la estatura o la longitud de los miembros pueden influir sobre la potencia alcanzada al realizar ejercicios de fuerza con pesas.
INTRODUCCION
La utilización de ejercicios de fuerza con pesos constituye una de las metodologías de entrenamiento más utilizadas para mejorar el rendimiento en muchas disciplinas deportivas. Debido a esto, muchos investigadores y entrenadores han propuesto diferentes metodologías para aplicar más eficientemente los entrenamientos de fuerza (Baechle y col., 2000; Bompa, 1995; Bosco, 1990, 2000; Fleck y Kraemer, 1997). Bosco (1991) fue uno de los primeros en sugerir que el control de la velocidad en los ejercicios de fuerza no debían solo restringirse a las evaluaciones de laboratorio o los ejercicios con dispositivos isocinéticos, ya que para orientar adecuadamente los entrenamientos de fuerza además de controlar el peso movilizado era necesarios determinar la potencia y la velocidad producida durante los ejercicios de entrenamiento habitual, ya que estas variables influyen significativamente las adaptaciones morfológicas y funcionales causadas por los diferentes tipos y formas de entrenamiento (Bosco, 1991). Es así, que en los últimos 20 años se han desarrollado diversos dispositivos para controlar el desplazamiento y calcular la fuerza, la velocidad y la potencia mecánica aplicada a los pesos o resistencias externas movilizadas al realizar los ejercicios utilizados habitualmente en los entrenamientos de fuerza (Dugan y col., 2004; Hori y col., 2006).
Si bien la aplicación de la mayor fuerza posible a la velocidad especifica con la que se desarrollan los movimientos de cada deporte es un factor fundamental para mejorar el rendimiento, con relación a la preparación general de fuerzas, la potencia alcanzada en ciertos ejercicios como el press de banca o la sentadilla ha suscitado un gran interés debido a que este parámetro podría constituir un índice de referencia muy importante para controlar la evolución del rendimiento durante el proceso de entrenamiento, incluso con mayor precisión respecto de los valores de fuerza máxima (1 MR) (Baker, D., 2001a; Hori y col., 2006). Cronin y Sleivert (2005) indican que, a diferencias de lo que sucede en los estudios de laboratorio con preparados de músculos aislados en donde la máxima potencia se produce sobre el 30% de la fuerza máxima isométrica, en los ejercicios de fuerza ejecutados por la acción de cadenas de movimiento integradas, los valores más altos de potencia pueden alcanzarse en un rango muy amplio de pesos, comprendido entre el 40% y el 80% del nivel de la 1 MR, siendo esta localización afectada por diversos factores como la mecánica del ejercicio, las características antropométricas, el nivel de rendimiento de los sujetos y las diferencias en las metodologías empleadas para medir la potencia de cada ejercicio específico (Baker, D, 2001b; Crewther y col., 2005).
Aunque existen numerosos estudios en donde se han establecido relaciones positivas entre los niveles de fuerza y la potencia mecánica alcanzada en ejercicios como el press de banca o la sentadilla paralela con el rendimiento en las acciones especificas de los deportes, como los lanzamientos o los saltos verticales (DeRenne y col., 2001), no conocemos muchos trabajos en donde se halla considerado la influencia de los parámetros antropométricos como el peso corporal, la estatura o la longitud de los miembros inferiores o superiores sobre los niveles de fuerza y potencia producida en los ejercicios de entrenamiento. Cronin y col (2003) en un estudio realizado con 21 varones jóvenes, destacan la importancia de la longitud de los miembros inferiores sobre la fuerza, velocidad y potencia producida en el split en mulitpower (Cronin y col., 2003), pero no se analizan las relaciones directas entre la longitud de los miembros superiores con la fuerza y la potencia alcanzada en ejercicios realizados con los brazos.
El objetivo principal de este estudio fue determinar el grado de relación entre el nivel de fuerza máxima estimado por el valor de la 1 MR (kg), la potencia máxima, media (PM) y pico (PP) así como de los pesos en donde se alcanzan los valores más altos de PM (%PM) y PP (%PP) en el ejercicio de press de banca plano con barra libre con el peso corporal (PC), la estatura (E), la longitud del antebrazo (LGAN), la longitud del brazo (LGBR) y la longitud total de los miembros superiores (LGT) en un grupo de estudiantes universitarios.
MATERIAL Y METODOS
Sujetos
Se evaluaron a 37 estudiantes universitarios (33 varones y 4 mujeres) de 22±2.1 años, activos, que no realizaban entrenamiento de fuerza de forma sistemática desde al menos 6 meses antes del inicio del estudio.
Todos los sujetos fueron informados de la naturaleza del estudio y firmaron un consentimiento por escrito.
Determinación de las variables antropométricas
El peso corporal (PC) y la estatura (E) se determinaron según la metodología descripta por Ross y Marflel-Jones (1991), mientras que las longitud total del miembros superior LGT, la del brazo (LBr) la del antebrazo (LAN) fueron determinadas según la metodología descrita por Norton y col (2000) (Norton y col., 2000; Ross y Marflel-Jones, 1991).
Ejercicio
Se realizó el press de banca plano con barra libre (PB) según la metodología descrita por Earle y Baechle (2000) p 359 (Earle y Baechle, 2000).
Familiarización
Se determinó un período familiarización de 3 semanas, durante las cuales los sujetos hicieron 9 sesiones de entrenamiento en días alternos. Cada sesión consistió en realizar 4 series de 8 a 12 repeticiones con 1 a 2 minutos de pausa, aplicando la mayor aceleración posible durante la fase concéntrica del ejercicio. Durante este periodo se indicó a los sujetos que eligieran el peso de entrenamiento para que al final de cada serie la percepción subjetiva de esfuerzo manifestada se corresponda con el nivel 6 o 7 de la escala de 10 puntos OMNI-RES (Robertson y col., 2003). Con el objetivo de facilitar este procedimiento, se colocaron 5 tablas de percepción en las paredes de la sala de entrenamiento de modo que estas estuviesen siempre visibles durante toda la sesión de trabajo.
Material
Para determinar la posición de la barra y calcular la potencia producida en cada movimiento se utilizó un transductor de posición, Real Power (Globos Italia), que consiste en un encoder rotatorio, con un registro mínimo de posición de 1 mm, que mide desplazamientos lineales por medio de un cable, cuyo extremo se aseguró a un sitio concreto de la barra de modo de no interferir en la ejecución del ejercicio. El funcionamiento del encoder permite que el cable se desplace verticalmente, según la dirección de movimiento, detectando e informando de la posición de la barra cada 1 milisegundo (1000Hz) a una interfase conectado a un ordenador, en donde con el software RELA POWER 2001 versión J110 usb, se calcularon los valores de fuerza, velocidad, potencia media y potencia pico producidas durante la fase concéntrica. En cada serie realizada se seleccionaba la repetición en la que habiendo completado correctamente la totalidad del rango del recorrido articular, se producía la mayor potencia media (Naclerio, A. F. y col., 2004; Thomas y col., 1996).
Test Progesivo (TPR)
Comprende la ejecución de varias series con peso creciente, de 2 a 3 repeticiones cada una, aplicando la máxima aceleración posible, alternadas con pausas de recuperación de 2 a 5 min, según la duración de los esfuerzos, para evitar los perjuicios de la fatiga acumulada (Dl`Slep y Gollin, 2002). Este protocolo permite comprobar el valor de la 1 MR, y al mismo tiempo obtener los niveles de fuerza aplicada, velocidad y potencia en un amplio espectro de pesos desde los muy ligeros (30 al 40%), moderados (41 al 60%) altos (61 al 80%), casi máximos (81 al 90%) y máximos (mas del 90%) (Naclerio, F. J. y Figueroa, 2004).
Determinación del Peso Inicial
Siendo el objetivo evaluar la fuerza máxima aplicada en el mayor espectro de resistencias posibles, el peso más bajo debe ser de una magnitud en la cual las expresiones de fuerza comienzan a ser significativas para realizar la acción y por debajo de las cuales predominan los factores vinculados a la estimulación neural (Velocidad de movimiento), por esto se estableció un peso equivalente al 30% de la 1MR, que cada sujeto estimaba que podría llegar a movilizar en un esfuerzo máximo de una sola repetición (Verkhoshansky, 2002).
Estimación de las Series Totales a Realizar
Se determinó la realización 8±2 series, de los cuales: la 1ª y 2ª serie deberían realizarse con pesos ligeros del 35 o 40% al 50%%, la 3º y 4º serie con pesos medios entre el 55 al 65%, la 5º y 6º serie con pesos medios-altos entre el 70% y el 80% y la 7º y 8º serie con pesos casi máximos y máximos, entre el 85% y el 95% o 100% (Naclerio, F. J. y Figueroa, 2004).
Estimación del Peso Final y su Incremento entre las Series
Una vez determinado el peso inicial y final, según el número máximo de series a efectuar, se calcularon los incrementos de los pesos entre las series aplicando la siguiente ecuación:
KIES = (1 MR estimado (kg) – Peso inicial ( kg) / (Series totales –1)
KIES: kg. a incrementar entre series.
Por ejemplo, un sujeto para el que se estime un valor de 1MR de 100 Kg, la determinación del peso inicial y los Kg a incrementar entre series será:
100 .30% = 30 Kg
KIES = (100-30)/(8-1) = 10 Kg
En este caso, se iniciaría con 30 kg, y se incrementarían 10 kg por serie. Debido a la disponibilidad de los discos que van de 1,25 kg, 2,5 kg, 5 kg, 10 kg, 15, y 20 kg no se pudo determinar un incremento porcentual exactamente igual para todos los sujetos, por lo cual se agrupó cada serie dentro de un rango de 8 unidades porcentuales: 15 a 30/ 31 a 40/ 41 a 50/ 51 a 60/ 61 a 70/ 81 a 90/ 91 a 99/ y 100%.
RESUMEN
Se evaluaron 37 estudiantes universitarios de 22±2.1 años en los que se determinó el peso corporal (PC), la estatura (E), la longitud del brazo (LBr), del antebrazo (LAN) y la longitud total del miembros superior (LGT) y se realizaron un test progresivo (TPR), en press banca plano con barra libre (PB). Se determinó el peso máximo (1MR), la potencia media (PM) y la (PP) producida con cada peso movilizado en el TPR y se localizaron los porcentajes de peso en donde los lograron los valores más altos de PM (%PM) y PP (%PP). El peso máximo (1MR) mostró coeficientes de correlación significativos (p<0.01) y altos con la PM (r=0.89) y la PP (r=0.905), mientras que La PM y la PP mostraron coeficientes de correlación significativos (p<0.01) y moderados con la E (r=0.53 y 0.57), la LAN (r = 0.62 y 0.63) y la LGT (r=0.55 y 0.59). Los pesos en donde se manifiestan los valores más altos de PM y PP se localizaron al 53.3±10.7% y 47.1±13.8% respectivamente. Se destaca además de poseer elevados niveles de fuerza máxima, ciertas variables antropométricas como la estatura o la longitud de los miembros pueden influir sobre la potencia alcanzada al realizar ejercicios de fuerza con pesas.
INTRODUCCION
La utilización de ejercicios de fuerza con pesos constituye una de las metodologías de entrenamiento más utilizadas para mejorar el rendimiento en muchas disciplinas deportivas. Debido a esto, muchos investigadores y entrenadores han propuesto diferentes metodologías para aplicar más eficientemente los entrenamientos de fuerza (Baechle y col., 2000; Bompa, 1995; Bosco, 1990, 2000; Fleck y Kraemer, 1997). Bosco (1991) fue uno de los primeros en sugerir que el control de la velocidad en los ejercicios de fuerza no debían solo restringirse a las evaluaciones de laboratorio o los ejercicios con dispositivos isocinéticos, ya que para orientar adecuadamente los entrenamientos de fuerza además de controlar el peso movilizado era necesarios determinar la potencia y la velocidad producida durante los ejercicios de entrenamiento habitual, ya que estas variables influyen significativamente las adaptaciones morfológicas y funcionales causadas por los diferentes tipos y formas de entrenamiento (Bosco, 1991). Es así, que en los últimos 20 años se han desarrollado diversos dispositivos para controlar el desplazamiento y calcular la fuerza, la velocidad y la potencia mecánica aplicada a los pesos o resistencias externas movilizadas al realizar los ejercicios utilizados habitualmente en los entrenamientos de fuerza (Dugan y col., 2004; Hori y col., 2006).
Si bien la aplicación de la mayor fuerza posible a la velocidad especifica con la que se desarrollan los movimientos de cada deporte es un factor fundamental para mejorar el rendimiento, con relación a la preparación general de fuerzas, la potencia alcanzada en ciertos ejercicios como el press de banca o la sentadilla ha suscitado un gran interés debido a que este parámetro podría constituir un índice de referencia muy importante para controlar la evolución del rendimiento durante el proceso de entrenamiento, incluso con mayor precisión respecto de los valores de fuerza máxima (1 MR) (Baker, D., 2001a; Hori y col., 2006). Cronin y Sleivert (2005) indican que, a diferencias de lo que sucede en los estudios de laboratorio con preparados de músculos aislados en donde la máxima potencia se produce sobre el 30% de la fuerza máxima isométrica, en los ejercicios de fuerza ejecutados por la acción de cadenas de movimiento integradas, los valores más altos de potencia pueden alcanzarse en un rango muy amplio de pesos, comprendido entre el 40% y el 80% del nivel de la 1 MR, siendo esta localización afectada por diversos factores como la mecánica del ejercicio, las características antropométricas, el nivel de rendimiento de los sujetos y las diferencias en las metodologías empleadas para medir la potencia de cada ejercicio específico (Baker, D, 2001b; Crewther y col., 2005).
Aunque existen numerosos estudios en donde se han establecido relaciones positivas entre los niveles de fuerza y la potencia mecánica alcanzada en ejercicios como el press de banca o la sentadilla paralela con el rendimiento en las acciones especificas de los deportes, como los lanzamientos o los saltos verticales (DeRenne y col., 2001), no conocemos muchos trabajos en donde se halla considerado la influencia de los parámetros antropométricos como el peso corporal, la estatura o la longitud de los miembros inferiores o superiores sobre los niveles de fuerza y potencia producida en los ejercicios de entrenamiento. Cronin y col (2003) en un estudio realizado con 21 varones jóvenes, destacan la importancia de la longitud de los miembros inferiores sobre la fuerza, velocidad y potencia producida en el split en mulitpower (Cronin y col., 2003), pero no se analizan las relaciones directas entre la longitud de los miembros superiores con la fuerza y la potencia alcanzada en ejercicios realizados con los brazos.
El objetivo principal de este estudio fue determinar el grado de relación entre el nivel de fuerza máxima estimado por el valor de la 1 MR (kg), la potencia máxima, media (PM) y pico (PP) así como de los pesos en donde se alcanzan los valores más altos de PM (%PM) y PP (%PP) en el ejercicio de press de banca plano con barra libre con el peso corporal (PC), la estatura (E), la longitud del antebrazo (LGAN), la longitud del brazo (LGBR) y la longitud total de los miembros superiores (LGT) en un grupo de estudiantes universitarios.
MATERIAL Y METODOS
Sujetos
Se evaluaron a 37 estudiantes universitarios (33 varones y 4 mujeres) de 22±2.1 años, activos, que no realizaban entrenamiento de fuerza de forma sistemática desde al menos 6 meses antes del inicio del estudio.
Todos los sujetos fueron informados de la naturaleza del estudio y firmaron un consentimiento por escrito.
Determinación de las variables antropométricas
El peso corporal (PC) y la estatura (E) se determinaron según la metodología descripta por Ross y Marflel-Jones (1991), mientras que las longitud total del miembros superior LGT, la del brazo (LBr) la del antebrazo (LAN) fueron determinadas según la metodología descrita por Norton y col (2000) (Norton y col., 2000; Ross y Marflel-Jones, 1991).
Ejercicio
Se realizó el press de banca plano con barra libre (PB) según la metodología descrita por Earle y Baechle (2000) p 359 (Earle y Baechle, 2000).
Familiarización
Se determinó un período familiarización de 3 semanas, durante las cuales los sujetos hicieron 9 sesiones de entrenamiento en días alternos. Cada sesión consistió en realizar 4 series de 8 a 12 repeticiones con 1 a 2 minutos de pausa, aplicando la mayor aceleración posible durante la fase concéntrica del ejercicio. Durante este periodo se indicó a los sujetos que eligieran el peso de entrenamiento para que al final de cada serie la percepción subjetiva de esfuerzo manifestada se corresponda con el nivel 6 o 7 de la escala de 10 puntos OMNI-RES (Robertson y col., 2003). Con el objetivo de facilitar este procedimiento, se colocaron 5 tablas de percepción en las paredes de la sala de entrenamiento de modo que estas estuviesen siempre visibles durante toda la sesión de trabajo.
Material
Para determinar la posición de la barra y calcular la potencia producida en cada movimiento se utilizó un transductor de posición, Real Power (Globos Italia), que consiste en un encoder rotatorio, con un registro mínimo de posición de 1 mm, que mide desplazamientos lineales por medio de un cable, cuyo extremo se aseguró a un sitio concreto de la barra de modo de no interferir en la ejecución del ejercicio. El funcionamiento del encoder permite que el cable se desplace verticalmente, según la dirección de movimiento, detectando e informando de la posición de la barra cada 1 milisegundo (1000Hz) a una interfase conectado a un ordenador, en donde con el software RELA POWER 2001 versión J110 usb, se calcularon los valores de fuerza, velocidad, potencia media y potencia pico producidas durante la fase concéntrica. En cada serie realizada se seleccionaba la repetición en la que habiendo completado correctamente la totalidad del rango del recorrido articular, se producía la mayor potencia media (Naclerio, A. F. y col., 2004; Thomas y col., 1996).
Test Progesivo (TPR)
Comprende la ejecución de varias series con peso creciente, de 2 a 3 repeticiones cada una, aplicando la máxima aceleración posible, alternadas con pausas de recuperación de 2 a 5 min, según la duración de los esfuerzos, para evitar los perjuicios de la fatiga acumulada (Dl`Slep y Gollin, 2002). Este protocolo permite comprobar el valor de la 1 MR, y al mismo tiempo obtener los niveles de fuerza aplicada, velocidad y potencia en un amplio espectro de pesos desde los muy ligeros (30 al 40%), moderados (41 al 60%) altos (61 al 80%), casi máximos (81 al 90%) y máximos (mas del 90%) (Naclerio, F. J. y Figueroa, 2004).
Determinación del Peso Inicial
Siendo el objetivo evaluar la fuerza máxima aplicada en el mayor espectro de resistencias posibles, el peso más bajo debe ser de una magnitud en la cual las expresiones de fuerza comienzan a ser significativas para realizar la acción y por debajo de las cuales predominan los factores vinculados a la estimulación neural (Velocidad de movimiento), por esto se estableció un peso equivalente al 30% de la 1MR, que cada sujeto estimaba que podría llegar a movilizar en un esfuerzo máximo de una sola repetición (Verkhoshansky, 2002).
Estimación de las Series Totales a Realizar
Se determinó la realización 8±2 series, de los cuales: la 1ª y 2ª serie deberían realizarse con pesos ligeros del 35 o 40% al 50%%, la 3º y 4º serie con pesos medios entre el 55 al 65%, la 5º y 6º serie con pesos medios-altos entre el 70% y el 80% y la 7º y 8º serie con pesos casi máximos y máximos, entre el 85% y el 95% o 100% (Naclerio, F. J. y Figueroa, 2004).
Estimación del Peso Final y su Incremento entre las Series
Una vez determinado el peso inicial y final, según el número máximo de series a efectuar, se calcularon los incrementos de los pesos entre las series aplicando la siguiente ecuación:
KIES = (1 MR estimado (kg) – Peso inicial ( kg) / (Series totales –1)
KIES: kg. a incrementar entre series.
Por ejemplo, un sujeto para el que se estime un valor de 1MR de 100 Kg, la determinación del peso inicial y los Kg a incrementar entre series será:
100 .30% = 30 Kg
KIES = (100-30)/(8-1) = 10 Kg
En este caso, se iniciaría con 30 kg, y se incrementarían 10 kg por serie. Debido a la disponibilidad de los discos que van de 1,25 kg, 2,5 kg, 5 kg, 10 kg, 15, y 20 kg no se pudo determinar un incremento porcentual exactamente igual para todos los sujetos, por lo cual se agrupó cada serie dentro de un rango de 8 unidades porcentuales: 15 a 30/ 31 a 40/ 41 a 50/ 51 a 60/ 61 a 70/ 81 a 90/ 91 a 99/ y 100%.