Lesión SLAP en Hombro

Lucas19791

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Hola, vi que hay otros posts con este tema, pero como lo mio es largo prefiero abrir uno aparte. Quiero compartir mi historia con todos aquellos que aman entrenar y que por ese motivo estan potencialmente expuestos en alguna medida a sufrir alguna lesión, o ya la han sufrido. La idea es describir lo que me pasó, y sacar algunas conclusiones que pueden ser útiles, sobre la actitud a tomar frente a una lesión cualquiera y los pasos necesarios a seguir.

Hace una semana me hicieron una artroscopía en el hombro izquierdo, por una lesión denominada SLAP, que describiré mas adelante. Ahora me encuentro en plena recuperación, pero primero quiero contar cómo llegué a esta situación.

Para no aburrir con todos los detalles de la historia, voy a enumerar sintéticamente lo que fue sucediendo con algunos ejercicios, a lo largo de por lo menos 3 años:

-Fondos en paralelas, por cansancio, distracción, o vaya a saber qué, bajo demasiado con el brazo izquierdo, y de manera un tanto brusca. El dolor hace que deje ese ejercicio durante bastante tiempo, sin mayores consecuencias (aparentemente).
-Vuelos frontales con mancuernas, me comienza a doler el hombro izquierdo, parecía ser en la inserción del deltoides en el húmero. También dejo de hacer ese ejercicio un tiempo, pero al retomarlo el dolor vuelve.
-Pecho en polea, me agarra un dolor muy fuerte que parece originarse en la zona de la axila, más bien dentro de la cápsula articular, y se irradia hasta la mano. Siempre el hombro izquierdo. También dejo de hacer ese ejercicio.

Después de una mudanza y haber dejado de entrenar unos meses debido a un gran estrés y cansancio que habían hecho estancarme, vuelvo a entrenar. Aunque tuve cuidado de empezar de a poco, sin mucho peso, parece que no fuí lo suficientemente gradual, y al cabo de unas 3 o 4 semanas semanas domencé a tener un dolor en el hombro bastante preocupante. Creo que el problema estaba en haber utilizado el peck-deck con una carga demasiado alta para los ligamentos (no así para los músculos, que como se sabe, se fortalecen más rápidamente).

Decidí dejar el gimnasio un par de meses, al cabo de los cuales volví a intentarlo nuevamente, esta vez con mucho mayor cuidado aún. Al poco tiempo, cuando comienzo a aumentar levemente la carga, compruebo que ese dolor no se había ido, y en ejercicios como las aperturas con mancuernas o el peck-deck con un peso mínimo, el dolor directamente era insoportable. Ahí dejé definitivamente.

Así comienza la segunda parte de la historia, que tiene que ver con los médicos y el sistema de salud. Pero no voy a contar los detalles porque es algo tedioso y aburrido, y no aporta mucho. Solo voy a mencionar que la primer consulta que hice fué un par de meses después de haber dejado el gimnasio, en septiembre del 2012, y las sucesivas consultas estaban muy espaciadas en el tiempo, con turnos de espera de 3 o 4 semanas, con lo que todo el asunto se estiraba demasiado. También tuve problemas con el seguro médico para realizar una resonancia magnética, ya que no me quería cubrir los gastos. A todo esto se sumaron feriados, vacaciones y más problemas con la burocracia, con lo que la operación, cuyos trámites concretamente comencé en febrero, recién el 8 de mayo pudo ser una realidad. No sé cómo es la stuación en otros países, pero en Argentina esto es lo que sucede, aunque si hubiese tenido más conocimiento de las mañas del sistema podría haber ahorrado algo de tiempo.

Como dije anteriormente, se me diagnosticó una lesión tipo SLAP, que es un desgarro en el labrum o rodete glenoideo. Este último es un anillo de cartílago que rodea la glenoides (la cavidad donde encaja la cabeza de húmero) y ayuda a estabilizar la articulación. Es una lesión que comunmente sufren deportistas que efectúan lanzamientos, como en el beisbol, y también volley, natación y otros. Incluso en oficios como el de los pintores, que trabajan con los brazos por encima de la cabeza, pueden suceder lesiones como estas. Lo que todavía no tengo del todo claro es cómo fue exactamente que yo me lesioné, pero según lo que conté antes, me da la impresión que hace un tiempo largo ya tenía indicios de una lesión que en un momento terminó por declararse completamente. Aquí hay una página que explica todo de una manera clara y sencilla, y al final una breve animación de cómo es la intervención quirúrgica mediante artroscopía:

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Ahora viene la tercera parte de la historia, que es la de la recuperación. Tengo que estar 3 semanas con un cabestrillo tipo Vietnam (que no me permite separar el codo del cuerpo), aunque ahora luego de una semana puedo sacarme el cabestrillo para bañarme, teniendo cuidado siempre de no separar el codo del cuerpo. Tengo que dormir con el cabestrillo puesto, y estando acostado el hombro me molesta bastante y no duermo bien. No estoy tomando analgésicos ya que no tengo la necesidad, durante el día el hombro no me duele, salvo que haga algún movimieto brusco. El cirujano, después de una semana, ya me sacó los puntos (son 3 cortes de aproximadamente 1centímetro cada uno, algo insignificante).

Dentro de 2 semanas voy a poder sacarme el cabestrillo definitivamente y empezar la rehabilitación. Según el médico, son necesarios unos 3 meses de rehabilitación para volver a tener una vida mas o menos normal, pero 6 meses para estar 100% recuperado. Se espera que mi hombro quede como nuevo, con toda su movilidad y fuerza, con lo que voy a poder volver a entrenar (aunque cuento con la posibilidad de que pueda quedar alguna limitación en el movimiento).

Para finalizar, quiero puntualizar algunas cosas que me parecen muy importantes cuando se trata de cuidar el cuerpo y curarlo, y tal vez sean tema de debate:

-No hay que minimizar los dolores. Debemos prestar atencion a cualquier molestia o dolor. Tomar un analgésico no hará que el problema desaparezca, debemos enfrentarlo. Sentir el cuerpo, tener conciencia de él en todo momento, de eso se trata.
-Prestemos mucha atención a la técnica de los ejercicios, aunque sean sencillos, estudiémoslos, mantengámonos informados.
-Evitemos entrenar si estamos muy cansados y estresados, esas son las condiciones ideales para lesionarse.
-Hay que actuar. No dejemos la consulta con el médico para más adelante o para ningún momento. Mientras más temprano actuemos, podemos evitar un daño mayor, y además, si la lesión implica un largo tiempo fuera del gimnasio, podremos volver antes.
-Sí, las consultas con especialistas, estudios, análisis, todo eso es algo tedioso, pero hay que estar mentalmente preparados y con la paciencia necesaria. Una vez que tenemos una lesión debemos aceptar la realidad y adaptarnos a ella.
-Ligado a lo anterior, las recuperaciones llevan tiempo, en algunos casos más que otros. Aprovechemos a organizar nuestras vidas programando otras actividades, tal vez otro deporte, un hobby postergado, lecturas, lo que sea. Después de todo, el gimnasio no es todo en la vida, seamos flexibles.
-Conservemos el humor y el optimismo. A mí dió un bajón bastante grande después de tener que dejar de entrenar, y del cual tardé en recuperarme. Una buena actitud es un factor clave en la recuperación.

Bueno, creo haber puesto todo lo que quería decir aquí. Si hay alguien a quien este relato pueda serle útil, habré cumplido con mi propósito. Tal vez a alguno de ustedes le sucedió algo similar. Estoy abierto a cualquier inquietud o comentario. Saludos!!!
 
hola lucas!!!! me gustaría que me comentaras como estas después de tu operación, ya que a mi me operan el dia 30 de este mes de slap. No se de que grado lo tengo porque tengo que ir el dia 15 para que me informen de ello,pero lo que si es seguro es que paso por quirófano.
gracias de antemano
 
Hola Warm, en otros foros escribí como me fue desde el día después, así que copio y pego mas abajo. Cualquier cosa que necesites, avisame.

Según el grado de la lesión SLAP, te van a poner más o menos 'arpones' (no se que otros nombres les ponen). En mi caso fueron 2, que según mi cirujano es lo más habitual. Yo opté por unos arpones de plástico bioabsorvibles, pero también están los comunes de titanio. Los dos funcionan bien.

Suerte con la operación!

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08-septiembre-2013:

Hola a todos! Vuelvo a escribir después de unos meses para contar cómo fué mi rehabilitación.


Despues de unas 3 semanas con cabestrillo el cirujano me mandó a hacer la rehabilitación con un kinesiólogo (aquí los llamamos así, no sé si reciben otro nombre en otros países), unas 3 veces por semana.


Allí me aplicaba todas las veces magnetoterapia (para desinflamar) y electroestimulación a un nivel muy leve como analgesia. Luego gradualmente me movía el hombro (movilidad pasiva) para ampliar el rango de movimiento. Eso duele mucho, pero era tolerable. Paralelamente, yo hacía todos los días otros ejercicios de movilidad utilizando un palo.


Después de un tiempo, probablemente casi dos meses, y cuando ya alcancé cierto grado de movilidad y capacidad de mover el brazo por mí mismo sin sentir mayores molestias, comencé a ejercitar bíceps y tríceps en el pequeño gimnasio del lugar donde rehabilitaba con una máquina de polea. Con 1 solo ladrillo ya tenía suficiente. Cuando me sentí un poco más fuerte agregué un ladrillo más, pero era muy pesado, así que bajé la cantidad de repeticiones (a todo esto, es notable que los kinesiólogos no tienen mucha noción sobre los principios y los tiempos de entrenamiento, por lo que en ese caso preferí seguir mi propio criterio.


Al ejercitar bíceps, mucho más debilitado que el tríceps siempre sentía un leve dolor en el hombro, lo cual es lógico ya que la zona de inserción de la porción larga del bíceps es en el lugar donde me operaron. Pero el kinesiólogo me dijo que está todo bien, no es para preocuparse y puedo seguir ejercitando.


Una cosa que me pasaba el principio era que a veces me agarraba un dolor muy fuerte en el hombro luego de hacer un movimiento. Después pensé que tal vez se trataba del tendón del bíceps, que se salía de su lugar natural, la corredera bicipital en el húmero. No lo pude confirmar, pero tengo la sospecha de que se trataba de eso. Con el tiempo ese dolor no apareció nunca más.


El cirujano me recalcaba la necesidad de que el kinesiologo me hiciera una movilización pasiva del hombro, cosa que hizo durante un tiempo, pero no sé si luego no tenía muchas ganas de hacerlo o realmente consideraba que no era necesario. La movilización pasiva es, según el cirujano, lo más importante y decisivo en todo esto para recuperar la movilidad del hombro.


Unos 3 meses luego de haber comenzado la rehabilitación, terminé las sesiones de kinesiología, la semana pasada. Ahora el médico me dijo que empiece a entrenar de nuevo, como lo hacía antes, por supuesto con una carga mucho menor, para terminar de recuperar los pocos grados de movilidad que faltan (según él estoy alrededor de un 85% recuperado en ese sentido). En 2 meses, si todo va bien, me da el alta definitiva.


A pesar de verme obligado a levantar pesos de niña exploradora, no saben la felicidad que siento de volver a entrenar un poco :) No creo que hayan novedades a partir de aquí -al menos eso espero-, salvo el hecho de tener gradualmente más fuerza y movilidad en el brazo izquierdo. En un par de meses les cuento el final de la historia.

Saludos!

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21-noviembre-2013:

Estimados: Inicié este post hace varios meses contando mi problema, la cirugía y cómo fue evolucionando la rehabilitación. Finalmente, el médico ayer me dió el alta definitiva. Fueron unos 6 meses en total desde la cirugía. Si bien estoy contento, me quedó la sensación de que la cosa podría haber ido mejor.

Pasaron 2 meses antes de esta última consulta con el médico que me operó, en los cuales por indicación suya comencé a entrenar, pero muy suavemente, como un total principiante. Al principio todo iba bien, e iba cobrando fuerza con rapidez.

Por las noches antes de acostarme adopté la costumbre de hacer algunos ejercicios de estiramiento para terminar de recuperar el rango total de movimiento. Los movimientos que se presentaban más rebeldes, y con los que no pude obtener mucho progreso, son las rotaciones externa e interna del hombro. Pero en cuanto a la abducción o flexión del hombro pude recuperar todo el rango de movimiento hasta igualarlo con el del otro brazo.

Uno de los ejercicios que comencé a hacer es tratar de agarrarme las dos manos por detrás, el brazo derecho pasándolo por arriba del hombro y el izquierdo por detrás de la cintura (es el brazo del hombro operado). Gradualmente llegué a tocarme los dedos hasta poder agarrar uno o dos entre sí, y finalmente todos los dedos.

Pero resulta que en un momento parece que forcé demasiado el movimiento (tal vez tampoco había hecho una buena entrada en calor), y el hombro me quedó doliendo varios días, por lo cual estuve muy preocupado. No obstante, el dolor fue cediendo hasta desaparecer.

Lo único que queda ahora es una molestia cuando hago movimientos extremos en rotación externa e interna, y otros esfuerzos mas complejos. El médico me dijo que eso es por la cicatriz, que tira. Lo que no me quedó claro es si eso va a desaparecer completamente en el futuro, aunque me advirtió que tal vez en los días húmedos puedo sentir una molestia, lo cual no es nada grave (me dijeron que no hay explicación por la cual las viejas heridas duelen los días húmedos).

Como dije antes, sólo tengo una limitación de unos pocos grados en la rotación interna y externa. El médico me dijo que esa limitación es protectora, y aseguró que aún así puedo llevar una vida completamente normal. Tal vez si fuese un deportista con una especialidad determinada me puede llegar a limitar un poco, pero no es el caso.

Además me dijo que tengo bastante elasticidad, con lo que entiendo que para todos los movimientos que uno realiza en la vida diaria -y tal vez también en el gimnasio- tengo una movilidad más que suficiente. Lo que no llegué a preguntarle es si voy a poder recuperar toda la fuerza del hombro y del bíceps, pero estimo que sí.

En fin, parece que no voy a poder recuperar esos grados de movimiento, que aunque no sean importantes los voy a extrañar Uno siempre quisiera que todo fuese igual que antes, pero esta es una realidad nueva y hay que adaptarse. Después de todo, estoy agradecido de poder recuperar una vida normal y además poder volver a entrenar. Eso es lo importante.

Ahora sólo queda seguir entrenando y de a poco tratar de volver a tener el mismo nivel que antes, aunque eso sí, esta experiencia me ha enriquecido y tomaré el entrenamiento con un enfoque más cuidadoso y conciente sobre mi cuerpo.

Espero que todo este relato les haya sido de utilidad y estoy a su disposición. Saludos!
 
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